Los mejores zapatos de novia para usar si tu boda es en jardín
Melissa Lara
@melissalaranovias
No se imaginan cuántas veces he visto los tacones de las novias llenos de tierra y lodo por aquello de que se hunden en el pasto. Con toda honestidad, la solución de ponerle tapas de plástico no me parece la más cool (opinión personal), y aunque puede ser la mejor opción en el momento, seguro que también puedes reconfigurar el tipo de zapatos de novia para usar si tu boda es en jardín. El chiste es lucir cada parte de tu look, sin la necesidad de tener que sacrificarlo con accesorios extraños, ¿no crees? Acá te comparto algunos de mis diseños favoritos.
Para que no tengas que sufrir de más con las alturas de los tacones y puedas disfrutar del día de tu boda con más comodidad, sobre todo si será al aire libre, mi mejor recomendación es que dejes los clásicos stilettos de lado. Existen muchísimas opciones con las que puedes armar tu look, sin tener que preocuparte por pisos a desnivel, pasto, lodo, empedrados, etc. Y no, no se trata de caer en las redes de los tenis (zapatos favoritos de su servidora por siempre), sino que puedes optar por mules, flats y otros estilos igualmente cool que, además, vayan a tono con la estética de tu look.
Flats nude
Nunca de los nunca te vas a equivocar con unas buenas flats, y menos si son de diseñador. Las clásicas de Christian Louboutin me encantan, porque se pueden combinar con todo tipo de vestidos de novia (desde los más clásicos, hasta los más contemporáneos) y, además, se ven increíblemente elegantes. Después de la boda las puedes usar con vestidos, faldas, jeans… ¡lo que se te ocurra! #buenísimainversión.
Mules en color metálico
Si te casas en jardín y te decidiste por un traje o por un mini dress, entonces necesitas unos zapatos planos que se distingan por su diseño en segundos. La mejor opción, sin duda, son las mules en un color que resalte pero que tampoco se convierta en protagonista. Este par es una belleza y queda perfecto para un estilismo cool y muy fashionista. Lo mejor de todo es que, sin importar cuántas horas pasen, seguirás viéndote guapísima y sin odiar tus zapatos.
Sandalias con aplicaciones
Sobre todo si te casas en un destino de clima cálido y quieres garantizar que estarás caminando con total libertad durante la boda, qué mejor que unas sandalias planas de piel. Lo mejor es que las compres con algún tipo de aplicaciones o pedrería para elevar su diseño, aunque siempre puedes apostar por un rollo minimalista y más casual. Si tu vestido de novia no tiene ningún tipo de detalles, entonces puedes seguir la misma inspiración en el par de zapatos que elijas, siempre previendo que se mantenga el mismo tono del diseño para que no armes un bloque de color medio extraño.
Sandalias con chunky heels
No necesariamente tienes que elegir un par de zapatos planos, ya que siempre puedes optar por un par de tacones que no sean elevados y que, además, tengan el suficiente grosor para que no te estés hundiendo en el pasto con cada paso que des. Los chunky heels son de las mejores opciones para añadir altura, caminar con comodidad y tener toda la libertad de movimiento que necesitas para bailar. Mi par favorito, sin duda, este de Valentino con los clásicos estoperoles.
Zapatos con tacón corrido
He de hacer la aclaración de que no soy la más fan de las plataformas, pero entiendo perfectamente el porqué este es un tipo de zapato top para una boda en jardín. Son lo suficientemente cómodos (depende de qué altura elijas) y también puedes comprarlos con tiras que vayan alrededor de los tobillos para tener más seguridad cuando camines. Lo que sí es un hecho es que con este tipo de diseños serás la mejor aliada del pasto y no tendrás que caminar a tientas para no manchar los tacones. Los puedes usar durante la ceremonia y luego hacer el cambio a unos zapatos planos para la fiesta.
Con estos zapatos de novia para boda en jardín podrás olvidarte por completo de comprar aditamentos extras para los tacones y, en cambio, mostrar tu look de la forma más cool de pies a cabeza. Te juro que no es necesario cansarte y terminar con los pies adoloridos; por el contrario es mejor que elijas un par que te acomode y con el que puedas caminar, brincar, bailar y disfrutar aún más del día de tu boda.