Los 4 errores más comunes al comprar el vestido de novia
Melissa Lara
@melissalaranovias
Existen un sinfín de listas con miles de consejos sobre la mejor forma para encontrar el vestido ideal. Por supuesto que puedes utilizar todo ese material a tu favor, pero seguro te servirá conocer cuáles son los 4 errores más comunes al comprar el vestido de novia. No se trata de descubrir el hilo negro, sino simple y sencillamente de tomar acción en torno algunos aspectos básicos y muy fáciles con los que, sin duda alguna, la experiencia será mil veces mejor. Toma nota de todo, plis!
- No establecer un presupuesto
Aunque no seas muy diestra en el tema del dinero, siempre es necesario tener claras las cantidades que vas a invertir en cada servicio o proveedor de la boda, y más cuando se trata del vestido de novia. Si de plano no tienes idea de cuánto puedes costar un diseño, lo mejor que puedes hacer es pedir estimaciones de precios a las tiendas (puedes enviarles un mensaje por Instagram) para que con ello puedas darte una idea de en qué lugar es más probable que encuentres el vestido para la boda.
Este paso es vital para empezar con la búsqueda, así que por nada del mundo te lo vayas a saltar. No sabes la frustración que puede generarte el hecho de llegar a una boutique sin una idea clara de los rangos de precios y, por supuesto, sin tener seguridad sobre cuánto invertirás. Este error solo da pie a dos escenarios: 1) que termines frustrada por no contar con el dinero suficiente o 2) que termines gastando de más y poniendo el jaque el presupuesto.
- No hacer cita
Llegar a una tienda sin cita es de los errores más comunes al comprar el vestido de novia. Para evitarte momentos incómodos, haz una lista con las tiendas que quieras visitar (tampoco hace falta que hagas cita en todas el mismo día) y aparta el tiempo necesario para que puedas ver con calma los vestidos y te los puedas probar. Considera que en la mayoría de las boutiques las citas tienen una duración de entre una y dos horas, así que ya con eso puedes darte una idea de cómo armar el tour.
Por COVID, no te olvides de preguntar cuáles son las medidas de higiene que están tomando, así como los requerimientos para la prueba del vestido en cuanto al número de personas que pueden acompañarte, por ejemplo.
- No confiar en tu instinto
No es mal plan, pero esta es de las peores cosas que puedes hacer al comprar el vestido de novia. Lo más común es que por las opiniones de la gente que va contigo termines con miles de dudas sobre qué diseño es el mejor para ti y, en un escenario catastrófico (estoy exagerando, por supuesto), te vayas con una prenda que ni siquiera te enamoraba al 100%. Por supuesto que siempre es bueno escuchar, pero tampoco es tu obligación convertir esas participaciones en una regla.
Si un vestido de novia te encanta, te fascina, se robó tu corazón, no te ves con otro y está dentro de tu presupuesto… que te valga lo demás.
- Querer probarte todos el mismo día
Ahora, si no lo tienes tan claro como el punto anterior, entonces ¡date tu tiempo! Te prometo que no es necesario que te pruebes todos los vestidos de novia habidos y por haber para saber cuál es el indicado para ti; de hecho esto puede llegar a confundirte más y, sin duda, terminarás extremadamente cansada por aventarte una jornada olímpica de boutique en boutique.
Procesa toda la información que estás viendo, piensa en los pros y en los contras, conecta con los que realmente te hagan sentir especial y deja lo otro de lado. Una vez que lo encuentres, confía en tu decisión y, de preferencia, ya no veas más vestidos de novia.
El objetivo es que esta se convierta en una aventura divertida y no en un martirio, así que solo toma en cuenta estos 4 puntos y, ahora sí, ¡a buscar el vestido de novia!