Vestidos sencillos perfectos para una novia minimalista
Melissa Lara
@melissalaranovias
¿Cuántas veces has escuchado que “menos es más”? Por lo general se le teme a la simplicidad, porque se asume que no tiene tanto sentido; sin embargo, las ventajas son muchas y se asoman con protagonismo a la hora de elegir tu look de novia. Si eres de las que le huyen a los volúmenes y a la mezcla de muchas telas (entiéndase los clásicos cortes princesa), seguro que estos vestidos sencillos serán buenísimos para consentir tu lado minimalista. Se trata de pensar en elegancia, encanto, austeridad y, por supuesto, un estilismo que sea atemporal.
Lo que más amo de esta tendencia es lo versátil que es, sobre todo para cumplir con los nuevos formatos de boda que han llegado post Covid. La sencillez ha ganado terreno y las grandes firmas de moda nupcial lo han entendido como una de las claves para expresar un estilo que se incline más hacia lo clásico y tradicional, sin tener que cumplir por completo con el protocolo. Aunado a eso, la mezcla que puedes hacer con accesorios y complementos es increíble, así como las opciones de maquillaje y peinado que puedes sumar a tu look.
Aunque no lo creas, las opciones son muchísimas y ahí es donde también se esconde parte del encanto. Por supuesto que todo dependerá no solo del estilo o estética que hayas elegido para tu boda, sino de cómo desees verte en el “sí, acepto”. Los vestidos de novia sencillos son buenísimos para integrarse en las distintas fases de la boda como un look único, o bien, para formar más de un estilismo con dos de ellos. El objetivo es que, sea cual sea la decisión que tomes, esa prenda vaya en armonía con tu personalidad… ¡eso siempre!
Para tener un look más sexy, siempre puedes inspirarte en la opción que presenta Pronovias: un vestido de novia sencillo de corte sirena con mangas largas y en tejido mikado. Los escotes pronunciados al frente o en la parte posterior de los diseños también lucen increíbles para lograr una imagen con más impacto. En contraste, si te gusta el rollo más inocente, la inspiración nupcial de Viktor & Rolf siempre es una buena muestra de cómo llevar acentos o detalles como los lazos en una prenda más estructurada y de estética contemporánea.
La sencillez la puedes encontrar en un vestido de novia lencero, uno de los protagonistas de la moda de los años 90 que ha regresado con todo en estos últimos años. La peculiaridad de estas creaciones es que, por lo general, van ceñidas al cuerpo, con tirantes spaghetti y con caídas de lo más elegantes; un ejemplo claro es el de Ines Di Santo. Jenny Packham sigue la misma fórmula, pero la complementa con algunos bordados y aplicaciones que, incluso en esta tendencia, se permiten siempre y cuando no le roben el protagonismo a la naturalidad total del diseño.
El ejemplo más claro sobre cómo llevar un vestido de novia sencillo lo tiene Amsale, una de las firmas que se ha inspirado por completo en las novias minimalistas para explotar el sello atemporal y llevarlo de una forma perfecta a las bodas. Para quienes son más románticas, las propuestas de Savannah Miller y Halfpenny London son espectaculares y se ven perfectas en cualquier escenario que elijas para celebrar tu boda.
No le tengas miedo a la austeridad, mucho menos si lo que buscas es que tu look de novia nunca pase de moda. Estos vestidos sencillos son la respuesta para entender, de una buena vez, que el menos sí es más, sobre todo cuando se trata de encontrar la mejor forma de mostrar tu estilo en el “sí, acepto”. ¿Con cuál de estos diseños te quedarías?